- Despliegue desde el día uno en el Modo IA de la Búsqueda, app de Gemini y entornos para desarrolladores.
- Mejoras en razonamiento y multimodalidad: LMArena 1501, GPQA 91,9% y ventana de contexto de 1M de tokens.
- Google Antigravity impulsa agentes con acceso a editor, terminal y navegador; grandes avances en benchmarks para desarrollo.
- Dos variantes: Gemini 3 Pro ya disponible y Deep Think con acceso escalonado tras evaluaciones de seguridad.
Google acelera su estrategia de inteligencia artificial con el lanzamiento de Gemini 3, una generación que llega integrada desde el primer día en productos clave como la Búsqueda en su «modo IA». El movimiento apunta a combinar rendimiento real con despliegue a gran escala, dejando atrás lanzamientos graduales.
En esta iteración, la compañía insiste en un enfoque menos estridente y más útil: respuestas precisas, multimodalidad y agentes capaces de ejecutar tareas. La meta es clara: que la IA pase de «asistente» a «colaborador» dentro de los flujos de trabajo, tanto para usuarios como para empresas en España y el resto de Europa.
Razonamiento avanzado y multimodalidad real

En pruebas públicas, la versión Pro lidera LMArena con 1.501 puntos y mejora a su predecesor en razonamiento complejo. Destaca especialmente en benchmarks como Humanity’s Last Exam (37,5% sin herramientas) y GPQA Diamond (91,9%), dos indicadores de profundidad y precisión factual.
El modelo integra de forma nativa texto, imagen, vídeo, código y audio, con una ventana de contexto de 1 millón de tokens. Esto permite abordar documentos extensos, clases en vídeo o repositorios de código completos, y generar salidas útiles como tablas, simulaciones y resúmenes personalizados.
En multimodalidad, los avances llegan también al vídeo: en Video‑MMMU alcanza el 87,2% y marca terreno en comprensión visual compleja. En escenarios cotidianos, esto se traduce en casos como traducir recetas manuscritas, crear guías interactivas a partir de artículos científicos o analizar un entrenamiento deportivo en vídeo para proponer mejoras concretas.
Respuestas más útiles y menos complacientes

Google afirma haber ajustado el comportamiento del sistema para reducir la «adulación» y priorizar la utilidad. La idea es que el sistema sea más directo, técnico cuando haga falta y orientado a resolver, de forma que hagan falta menos prompts para llegar a un resultado válido.
Esta mejora en la detección de intención y en el control del tono es una pieza clave de los futuros agentes de la compañía: respuestas claras, verificables cuando sea posible y con menos rodeos, especialmente en tareas complejas.
Antigravity y herramientas para desarrolladores

Junto al modelo, Google estrena Antigravity, una plataforma basada en agentes con acceso directo al editor, la terminal y el navegador. El objetivo es que la IA no solo sugiera, sino que ejecute y valide código dentro del flujo de trabajo del desarrollador.
En pruebas orientadas a desarrollo, Gemini 3 registra 1.487 ELO en WebDev Arena, un 54,2% en Terminal‑Bench 2.0 y 76,2% en SWE‑bench Verified, indicadores de avances en uso de herramientas y corrección automática de código. Para la práctica diaria, esto se traduce en generar una web funcional, testearla y ajustarla de forma autónoma según los requisitos.
Los desarrolladores pueden trabajar con Gemini 3 desde Google AI Studio, Vertex AI y la CLI de Gemini; Antigravity se integra además con otros modelos de la familia (por ejemplo, Gemini 2.5 para control de ordenador y el modelo de imagen Nano Banana) para ampliar casos de uso.
Modelos y disponibilidad: Pro y Deep Think
El lanzamiento llega con dos variantes. Por un lado, Gemini 3 Pro, disponible en el «modo IA de la Búsqueda», la app de Gemini y las herramientas para desarrolladores (API, AI Studio y Vertex AI). En el buscador, existe un selector de modelo para elegir entre rapidez o mayor capacidad, según la consulta.
Por otro, Gemini 3 Deep Think amplía el razonamiento (con ejecución de código) y alcanza un 45,1% en ARC‑AGI en evaluaciones con desafíos novedosos. Esta variante se ofrece primero a evaluadores de seguridad y, más adelante, a suscriptores de Google AI Ultra; en EE. UU., el plan AI Ultra tiene un precio de 249,99 $/mes, con disponibilidad que puede variar por región.
Google afirma haber reforzado las pruebas de seguridad bajo su marco interno y con evaluación externa (incluido el AISI del Reino Unido), con más resistencia a inyecciones de prompt y salvaguardas frente a usos indebidos.
Impacto en España y Europa
Desde el primer día, Google promete una cobertura lingüística más amplia, con 30 nuevos idiomas que incluyen catalán, gallego y euskera. Para empresas europeas, la disponibilidad en Vertex AI permite integrar Gemini 3 en flujos de trabajo con controles de cumplimiento y residencia de datos propios de la región.
En el frente empresarial, la compañía subraya que más del 70% de los clientes de Google Cloud ya usan sus capacidades de IA y que 13 millones de desarrolladores han trabajado con sus modelos generativos, señales de un ecosistema relevante para tejido productivo y administraciones en la UE.
Búsqueda con modo IA y efectos en el ecosistema
La integración simultánea en la Búsqueda marca un cambio de ritmo: respuestas más ricas con visualizaciones, tablas y simulaciones creadas al vuelo. La experiencia concentra tareas dentro del propio Google, lo que puede reconfigurar hábitos de consumo de información.
Para editores y creadores, el reto pasa por optimizar contenidos para interacciones generativas y para superficies donde el usuario consulta, compara y actúa sin saltar entre múltiples pestañas.
Más allá de los benchmarks: negocio y competencia
Aunque el liderazgo en tablas de rendimiento ayuda, la carrera se desplaza hacia la utilidad y la monetización. La integración de Gemini 3 en productos de consumo y empresa, junto con suscripción avanzada y herramientas para desarrollo, busca justificar la inversión en infraestructura.
El panorama competitivo se mantiene activo, con actualizaciones de OpenAI y el agente de Anthropic. La propuesta de Google apuesta por escala, integración inmediata y una experiencia agéntica más ambiciosa; la adopción sostenida por parte de usuarios y organizaciones será el verdadero termómetro.
Con un despliegue amplio, mejoras palpables en razonamiento y capacidades agénticas, y una presencia destacada en la Búsqueda, la IA de Google apunta a consolidar como un componente cotidiano: más precisa, multimodal y lista para trabajar codo con codo con quienes necesitan resultados y no solo respuestas.