- La financiación rápida permite estrenar portátil o PC gaming al momento, eligiendo entre diferentes plazos y tipos de interés según tu perfil.
- Plataformas como Aplazame, seQura, Cofidis, Cetelem o Pepper ofrecen pagos fraccionados con procesos online ágiles y cuotas adaptadas.
- Es clave revisar TAE, límites de importe, condiciones de devolución y gestionar bien cuotas y posibles amortizaciones anticipadas.
- Para que la compra merezca la pena, conviene elegir un equipo equilibrado en procesador, gráfica, pantalla, RAM, almacenamiento y autonomía.
Dar el salto a un portátil nuevo o a un PC gaming potente ya no es cosa solo de quienes tienen todos los ahorros listos. Hoy puedes estrenar equipo casi al momento gracias a distintas fórmulas de financiación rápida, pagos fraccionados y créditos online que te permiten repartir el coste en cuotas cómodas sin tener que esperar meses. Si te dedicas a trabajar con el ordenador o eres de los que viven los videojuegos al máximo, tener un buen equipo deja de ser un capricho para convertirse en una herramienta clave del día a día.
La clave está en conocer bien cómo funciona cada sistema de financiación, qué intereses aplica, qué requisitos tiene y hasta dónde puedes estirar tu presupuesto sin poner en riesgo tu economía personal. Desde soluciones como Aplazame o seQura hasta opciones específicas con Cofidis, Cetelem o plataformas tipo Pepper, hay un abanico enorme para adaptar la compra a tu situación. Y, por supuesto, también es importante saber qué tipo de portátil o PC gaming te compensa según su procesador, gráfica, pantalla o batería, para no pagar de más por algo que no vas a aprovechar… o quedarte corto.
Por qué financiar tu nuevo portátil o PC gaming puede ser una buena idea
Renovar el equipo informático en el momento justo es cada vez más importante: el software exige más recursos, los juegos piden mejores gráficas y muchos trabajos demandan portátiles potentes y ligeros. Esperar a ahorrar durante meses puede hacer que pierdas ofertas, campañas como Black Friday o cambios de catálogo que traen componentes más modernos a buen precio.
Recurrir a préstamos rápidos o pagos a plazos te permite disfrutar desde ya de ese portátil para trabajar, estudiar o jugar, sin tener que limitarte al dinero que tienes disponible hoy en la cuenta. Así puedes escoger el equipo que realmente encaja con tus necesidades técnicas en lugar de conformarte con un modelo justo “porque es lo que hay ahora mismo”.
La gran baza de estas financiaciones es la flexibilidad: eliges el importe, el número de cuotas y, en muchos casos, incluso el día del mes en el que quieres pagar. Esto facilita cuadrar los pagos con tus ingresos, evitar apuros a final de mes y mantener el control sobre tu presupuesto sin renunciar a un buen hardware.
Otro punto fuerte es la agilidad del proceso. La mayoría de estas soluciones son 100 % online: rellenas algunos datos básicos, verificas tu identidad, añades una tarjeta bancaria y recibes una respuesta casi inmediata. Nada de papeleo interminable ni de desplazamientos a la oficina del banco. Y si prefieres una atención más directa, muchas compañías ofrecen también gestión por teléfono gratuito o asistencia por correo.
Eso sí, financiar no significa gastar sin cabeza. Es fundamental calcular bien cuánto necesitas, qué precio tiene el equipo que te interesa y qué cuota mensual puedes asumir sin ir ahogado. Con un mínimo de planificación, estos sistemas de financiación se convierten en una herramienta útil para actualizar tu entorno tecnológico, mejorar tu productividad y disfrutar de tus juegos favoritos sin tener que esperar medio año.

Financiación con Aplazame: cómo funciona y qué tener en cuenta
Aplazame es una de las opciones más populares para fraccionar el pago de un portátil o PC gaming directamente en la tienda online donde lo estás comprando. Es un sistema de pago a plazos integrado en muchos comercios de informática y hardware que te deja elegir en cuántos meses quieres devolver el importe.
Puedes repartir el pago entre 2 y 36 meses, y al seleccionar el número de cuotas verás al instante cuánto pagas cada mes y cuál es el coste total de la financiación. El simulador te muestra la mensualidad y los intereses aplicados para que no haya sorpresas de última hora y sepas de antemano el TAE aproximado que vas a asumir.
Cuando confirmas la compra con Aplazame se te pide una tarjeta de crédito o débito válida. En el momento en que se acepta la operación se carga un pago inicial (la famosa “entrada”) que sirve para verificar que el método de pago funciona correctamente. El resto de cuotas se cobran de forma automática todos los meses en la fecha que hayas elegido.
El coste de financiar con Aplazame depende de varios factores. Todas las operaciones están sujetas a un TAE variable que podrás comprobar antes de finalizar el pago gracias al simulador. En la práctica, el importe financiado se compone de tres elementos: la entrada que pagas al hacer el pedido, el préstamo que te concede Aplazame y los intereses, que representan el coste total del crédito.
Existe también un límite máximo de financiación: normalmente podrás financiar hasta unos 2.500 € del valor de la compra. Si tu pedido supera esa cantidad, simplemente pagas la diferencia al contado y el resto se fracciona. Por ejemplo, si el pedido son 3.200 € y decides pagar en 12 meses, se calcularán las cuotas sobre 2.500 €, y la parte restante (700 €) se sumará al pago inicial, quedando una primera cuota más alta y el resto de mensualidades iguales.
Pasos para financiar tu PC o portátil con Aplazame

El proceso de compra con Aplazame es bastante sencillo y está pensado para que no te pierdas en ningún momento. En general, los pasos básicos suelen ser los siguientes dentro de la tienda online donde compras tu portátil o PC gaming.
Primero añades el equipo y los accesorios al carrito: el PC, monitor, teclado, ratón, auriculares… todo lo que quieras financiar en el mismo pedido. Cuando tengas listo el carrito, pulsas en la opción de tramitar pedido o pasar por caja.
A continuación rellenas tus datos personales y de envío (nombre, apellidos, dirección completa, teléfono y correo electrónico) y eliges la modalidad de transporte que mejor te encaje, ya sea estándar o prioritaria si te corre prisa recibir el equipo.
En el apartado de métodos de pago es donde seleccionas “Aplazame – Pago a plazos”. Después aceptas los términos y condiciones del servicio y continúas al siguiente paso, donde podrás definir las condiciones del crédito.
Ahora eliges el número de cuotas y el día de cobro. La plataforma te mostrará en tiempo real la cantidad exacta que pagarás cada mes y el importe total de intereses. Para completar la solicitud introducirá tu DNI y tu teléfono móvil, ya que normalmente se realiza una verificación vía SMS como medida de seguridad.
La respuesta de Aplazame suele ser prácticamente instantánea. En algunos casos, pueden realizar comprobaciones adicionales de identidad fuera de la web de la tienda, como una llamada al cliente o la solicitud de enviar una foto del DNI o un selfie. Una vez aprobado, el pedido queda confirmado y se procesa el envío del equipo.
Gestión de cuotas, cambios y amortización anticipada con Aplazame
Una vez la financiación está activa, puedes gestionar bastantes aspectos desde tu panel de usuario en la web de Aplazame. Lo más habitual es querer cambiar la fecha en la que se cargan las cuotas, por ejemplo para ajustarla al día que cobras la nómina o evitar que coincida con otros gastos fijos.
Modificar el día de cobro es posible contactando con Aplazame o desde tu área de cliente, siempre que se cumplan las condiciones de su política interna. También desde ese panel podrás revisar el estado de los pagos, cuotas pendientes y el calendario de vencimientos.
Las cuotas se abonan siempre con tarjeta bancaria, por lo que es importante mantenerla activa y con saldo disponible en las fechas marcadas. Si cambias de tarjeta o de banco, tendrás que actualizar los datos para evitar devoluciones o recargos.
Si en algún momento quieres adelantar el pago del crédito, también puedes hacerlo. Por ejemplo, si has financiado a 6 meses y al tercer mes decides liquidar todo lo restante de golpe, podrás gestionar la amortización anticipada desde tu panel de control o escribiendo a atención al cliente de Aplazame. De esta forma reduces el tiempo de endeudamiento y, según las condiciones, puedes rebajar parte de los intereses futuros.
En cuanto a los requisitos para acceder a la financiación, normalmente se exige disponer de DNI español o NIE válido, una tarjeta bancaria y superar la verificación vía SMS y los filtros internos de riesgo. La aprobación nunca está garantizada al 100 %, ya que depende de tu perfil de crédito y de las políticas de la entidad en ese momento.
seQura: pagos fraccionados y opción de pagar a 3 meses sin intereses
seQura es otro sistema de financiación muy extendido en tiendas de tecnología, que permite fraccionar el pago de tu nuevo ordenador de forma rápida y bastante flexible. Funciona de manera similar a otras plataformas de pago a plazos, integrándose como un método de pago adicional dentro del proceso de compra.
Con seQura puedes escoger plazos desde 3 hasta 24 meses, ajustando la cuota a tu presupuesto. Al seleccionar el número de mensualidades, verás al momento cuánto pagarás cada mes y el desglose de intereses totales, de forma muy transparente.
Una característica interesante de seQura es la posibilidad de financiar a 3 meses sin intereses en muchos comercios. En esta modalidad, repartes el importe en tres cuotas y no pagas sobrecoste financiero, más allá de posibles comisiones específicas si la tienda las aplicase. Si optas por más meses (6, 12, 24…), entonces sí entran en juego los intereses habituales.
Al completar la solicitud de financiación se te pedirá también una tarjeta de débito o crédito. seQura suele cargar una cuota de entrada en cuanto se procesa el pedido. Ese importe puede aparecer como retenido hasta unas 24 horas; si la operación es finalmente aceptada, se realiza el cobro, pero si se rechaza, liberan el saldo y te devuelven el dinero automáticamente.
Tras el primer pago, el resto de cuotas se cobran de forma automática en el día del mes que elijas, a partir del mes siguiente. Es importante que la tarjeta tenga fondos en esas fechas para evitar incidencias. Además, si tu compra supera cierto importe (por ejemplo, más de 3.000 €), la parte que excede el límite que seQura está dispuesto a financiar se añade al pago inicial, igual que ocurre con otras plataformas.
Ajustes de plazos y atención al cliente en seQura
Uno de los puntos fuertes de seQura es su flexibilidad a la hora de recalcular plazos. Si, por ejemplo, intentas financiar una compra a 24 meses y su sistema de riesgo no lo autoriza, pueden proponerte una alternativa: reducir el número de cuotas (por ejemplo a 12) y recalcular la operación para ver si así sí cumple sus criterios.
Este tipo de alternativas te puede venir muy bien si estás cerca de tu límite de crédito o si tu perfil financiero no encaja con las condiciones más largas. De esta manera, no te quedas sin financiación, sino que simplemente ajustas el plan de pagos.
En caso de dudas, incidencias con los cargos o necesidad de información más detallada, seQura dispone de canales de atención al cliente, normalmente por teléfono y correo electrónico, además de su propia web. Desde allí puedes revisar condiciones, resolver preguntas frecuentes y gestionar aspectos de tu financiación.
Como en cualquier crédito al consumo, el TAE final depende de varios factores: el importe total, el número de cuotas elegido, tu perfil de riesgo y el acuerdo concreto que la tienda tenga con seQura. Algunas tiendas, en determinadas campañas, incluso asumen parte o la totalidad de los costes para ofrecer TAE 0 % en ciertos plazos.
Antes de confirmar la operación conviene revisar bien el desglose de cuota mensual, intereses y total a pagar, asegurándote de que encaja con tu presupuesto y de que entiendes las condiciones de devolución, cambios o devoluciones de producto.
Pago fraccionado con Cofidis y Amazon Pay
Otra vía para financiar tu portátil o PC gaming es el pago en 4 plazos ofrecido por Cofidis a través de Amazon Pay, disponible en algunas tiendas especializadas. La principal diferencia respecto a otros sistemas es que se apoya en tu cuenta de Amazon para la gestión del pago.
Para usar esta modalidad, el proceso es muy directo: añades los productos al carrito, accedes a él y haces clic en el botón “Paga con Amazon”. A partir de ahí, inicias sesión con tu cuenta de Amazon y sigues las indicaciones hasta seleccionar el pago fraccionado con Cofidis, sin necesidad de introducir de nuevo tus datos bancarios en la web de la tienda.
La financiación se gestiona íntegramente con Cofidis, de forma externa a la tienda donde compras el PC. Esto significa que la tienda solo ve la información necesaria para tramitar y respaldar el pedido (como tu nombre, dirección de envío y correo), pero no participa en el estudio de crédito ni en la aprobación.
El pago en 4 cuotas con Cofidis tiene intereses, que varían en función del importe que se vaya a financiar y de las políticas vigentes. La tienda no puede calcular ni intermediar en este sistema de pago, por lo que cualquier consulta detallada sobre intereses, aprobación o condiciones concretas deberás hacerla directamente a Cofidis.
Hay también un límite de importe: normalmente solo se permite financiar compras inferiores a 1.000 €. Si el importe supera ese umbral, pueden denegar o cancelar el pedido. En ese caso, siempre puedes volver atrás y probar con otras modalidades de financiación como Aplazame o seQura disponibles en la tienda.
Otras opciones de financiación: Cetelem, Pepper y pagos fraccionados adicionales
Además de Aplazame, seQura o Cofidis, existen otras entidades financieras que colaboran con tiendas de tecnología para ofrecer pagos fraccionados, como Cetelem, Pepper o plataformas como Mercado Pago o distintos sistemas propios de cada comercio.
El pago fraccionado con Cetelem suele integrarse en la propia tienda como una opción más, donde puedes elegir entre diferentes plazos (por ejemplo, de 3 a 36 cuotas mensuales). El tipo de interés puede ir desde un TAE 0 % en campañas promocionales hasta un máximo fijado por la tienda o el propio banco.
En función de la política financiera de cada comercio, parte o todos los costes pueden ser asumidos por la tienda, permitiendo que el cliente disfrute de financiación sin intereses durante periodos concretos. Ten en cuenta que el TAE final puede variar no solo por el plazo, sino también por tu perfil de crédito (ingresos, historial, deudas previas…).
Plataformas como Pepper también colaboran en la financiación de compras tecnológicas, incluyendo portátiles y PCs gaming. En estos casos, el proceso suele consistir en seleccionar el método de pago financiado en la tienda, rellenar tus datos, y tras la aprobación, se generan las cuotas correspondientes que se irán cobrando en tu tarjeta o cuenta bancaria.
En lo referente a costes adicionales, lo habitual es que veas el importe total de tu pedido, intereses incluidos, en el momento de confirmar la compra, sin cargos ocultos posteriores. Las condiciones exactas (si hay comisiones de apertura, seguros asociados, etc.) dependerán de cada entidad, por lo que conviene leer la letra pequeña.
Si surge la necesidad de devolver el producto, en muchas tiendas podrás gestionar la devolución bien en el establecimiento físico, bien a través de su web. Una vez la devolución esté aceptada, la financiera (por ejemplo, Pepper) se encarga de reembolsar lo que ya hayas pagado, utilizando el mismo método de pago que usaste para la primera cuota y ajustando el plan de financiación.
Gestión de datos, área de cliente y documentación necesaria
La mayoría de entidades que financian compras tecnológicas disponen de un área de cliente propia, accesible desde su web, donde puedes revisar toda la información sobre tus contratos activos, cuotas pendientes, pagos realizados y próximos vencimientos.
En el caso de plataformas como Pepper, puedes entrar en tu zona privada introduciendo tu DNI, y desde ahí gestionar asuntos como la modificación de la cuenta bancaria, la actualización de datos personales o la consulta de tus financiaciones vigentes.
Para cualquier consulta más específica (por ejemplo, dudas sobre un cargo concreto, cambios de condiciones, cancelaciones anticipadas, etc.), suelen disponer de correos electrónicos de soporte y teléfonos de atención al cliente dedicados a resolver incidencias.
En lo relativo a documentación, casi todas las financieras pedirán al menos tu DNI o NIE, número de teléfono y, en algunos casos, documentación adicional para verificar tu identidad o tu solvencia. Por ejemplo, algunas soluciones requieren que presentes el DNI al recibir el pedido a domicilio, como medida antifraude.
Las tiendas también se reservan ciertos derechos, como cancelar pedidos que lleven varios días sin pago o sin que el cliente haya terminado de formalizar la financiación. Por eso es importante seguir todos los pasos del proceso y completar la solicitud de crédito hasta el final para que el pedido quede correctamente registrado.
Características clave a valorar en tu nuevo portátil o PC
Una vez clara la parte de la financiación, toca asegurarse de que el equipo que vas a pagar a plazos realmente merece la pena. Ya sea un portátil o un sobremesa gaming, es importante revisar sus características técnicas y de diseño para que se adapten a tu uso real.
En cuanto al diseño y el teclado de los portátiles, encontrarás desde chasis de aluminio elegantes y resistentes hasta estructuras de plástico robusto pensadas para aguantar trote diario. Hay modelos ultrafinos para quienes priorizan la movilidad y otros más voluminosos orientados al rendimiento y la refrigeración.
Los teclados pueden venir en distintos formatos: QWERTY en español, italiano, AZERTY, QWERTZ, etc. Si vas a escribir mucho, conviene fijarse en el idioma y la distribución de teclas. En muchos portátiles modernos, especialmente los gaming o de gama media-alta, se incluye retroiluminación para que puedas ver las teclas cómodamente en habitaciones con poca luz.
La pantalla es otro elemento crucial. Lo habitual es moverse entre 13,3 y 17,3 pulgadas, con resolución Full HD (1920 x 1080) como estándar. Algunos equipos más avanzados ofrecen 2K o 4K, lo que se traduce en mayor nitidez, ideal para edición de foto y vídeo o para disfrutar de contenidos multimedia de alta calidad.
En tecnología de panel, los IPS y LED siguen dominando el mercado, con buenos ángulos de visión, colores bastante fieles y niveles de brillo suficientes para trabajar en interiores sin problema. Muchos modelos incluyen tratamientos antirreflejos y tecnologías de protección ocular para reducir la fatiga visual en sesiones largas.
Rendimiento: procesador, memoria, almacenamiento y gráfica
El corazón del equipo lo marca el procesador. En portátiles y PCs gaming actuales encontrarás familias como Intel Core i3, i5, i7 y i9, así como AMD Ryzen 3, 5, 7 y 9. Para tareas básicas y ofimática, un i3 o Ryzen 3 puede ser suficiente, mientras que para multitarea intensa, edición de vídeo o gaming serio, suele ser recomendable saltar al menos a un i5/Ryzen 5 o superior.
La memoria RAM es clave para la fluidez. Hoy en día se considera que 8 GB es el mínimo razonable para un uso general, pero si piensas jugar a títulos modernos, hacer streaming o trabajar con muchas aplicaciones a la vez, es muy recomendable apostar por 16 GB o más. En PCs gaming avanzados, 32 GB ya no es ninguna locura.
En almacenamiento, los SSD se han convertido en estándar. Capacidades habituales son 256 GB, 512 GB o 1 TB, ofreciendo tiempos de arranque y carga de programas mucho más rápidos que los viejos discos duros mecánicos. Algunos equipos combinan SSD para el sistema y aplicaciones con un HDD adicional para almacenar juegos y archivos pesados.
El apartado gráfico marca la diferencia para jugar. Muchos portátiles de trabajo montan gráficas integradas como Intel Iris Xe o AMD Radeon Vega, suficientes para tareas diarias e incluso algo de gaming ligero. Pero si quieres mover juegos exigentes con buena calidad, tendrás que mirar modelos con tarjetas dedicadas NVIDIA GeForce o AMD Radeon, cuya potencia variará según la serie y la generación.
En multimedia, casi todos los equipos incluyen altavoces estéreo con efectos de sonido envolvente en distintos niveles de calidad, webcam HD integrada y micrófonos digitales. Esto resulta fundamental para videollamadas, clases online, streaming y comunicación por voz mientras juegas.
Conectividad, batería y sistema operativo: detalles que marcan el día a día
La conectividad es otro punto a revisar con lupa. En inalámbrico, lo más normal es encontrar Wi‑Fi de doble banda (Wi‑Fi 5 o Wi‑Fi 6) y Bluetooth 4.2 o 5.0, lo que garantiza conexiones estables con redes, auriculares, mandos y otros periféricos.
A nivel de puertos físicos, deberías fijarte en cuántos USB-A y USB-C incluye, si dispone de HDMI para conectar un monitor externo, lector de tarjetas SD para fotógrafos o creadores de contenido, salida de audio de 3,5 mm y, en algunos casos, puerto RJ45 Ethernet para conectar el cable de red directamente y obtener menor latencia.
La autonomía es crucial en portátiles. Muchos modelos modernos ofrecen baterías capaces de aguantar hasta unas 12 horas de uso ligero, aunque en tareas intensivas o juegos esa cifra baja de forma considerable. Las tecnologías de ahorro energético y los modos de gestión de batería ayudan a estirar esos minutos extra cuando no tienes enchufe cerca.
La carga rápida es otro extra muy práctico. Hay portátiles que permiten recuperar hasta un 50 % de batería en apenas 30‑45 minutos, algo muy útil si necesitas salir corriendo a clase, al trabajo o de viaje y no puedes esperar a una carga completa.
En cuanto al sistema operativo, Windows 10 y Windows 11 siguen siendo la norma, aunque también existen equipos con Linux preinstalado o listos para que tú elijas qué sistema montar. Algunos modelos incluyen funciones avanzadas de seguridad como lector de huellas, módulos TPM, reconocimiento facial o webcam con obturador físico para proteger tu privacidad.
Costes, intereses y control de tu economía personal
Al financiar un portátil o PC gaming es vital tener claro cuánto vas a pagar en total. Eso incluye el precio base del equipo más los intereses y posibles comisiones. La gran mayoría de plataformas transparentan estos datos antes de que confirmes el pedido, mostrando la cuota mensual, el número de plazos, el TIN y el TAE aproximado.
Algunas tiendas y financieras ofrecen periodos con TAE 0 %, en los que reparten el pago en varias cuotas sin añadir intereses, asumiendo ellas mismas el coste de la operación. En otros casos, el interés será ajustado pero existente, y variará según el plazo, el importe y tu perfil de crédito.
Mantener tu economía bajo control implica elegir plazos realistas. Una cuota baja a muchos meses puede resultar cómoda, pero elevará el coste total por intereses; en cambio, un plazo demasiado corto puede hacer que la mensualidad sea insostenible. Lo ideal es encontrar un punto medio en el que puedas llegar sin agobios y sin disparar el coste final.
La mayoría de financieras cobran las cuotas de forma automática en tu tarjeta o cuenta bancaria, algo que es cómodo pero que te obliga a ser previsor con el saldo disponible. Revisar tu área de cliente de vez en cuando y llevar un pequeño control en tu presupuesto mensual es una buena forma de evitar sustos.
Si en algún momento tu situación mejora (por ejemplo, recibes un ingreso extra o aumentan tus ingresos fijos), puedes plantearte amortizar anticipadamente el crédito. De este modo reduces el tiempo de endeudamiento y, según el contrato, podrías rebajar parte de los intereses pendientes.
Devoluciones, cambios y seguridad en la financiación
Otro aspecto a considerar es qué ocurre si necesitas devolver el portátil o el PC financiado. Las políticas varían según la tienda, pero en general podrás iniciar la devolución desde la propia web del comercio o acudiendo a una de sus tiendas físicas, si las tiene.
Una vez la devolución sea aceptada, la financiera asociada al pago (Pepper, seQura, Aplazame, Cofidis, etc.) recalculará lo que ya has pagado y te devolverá el importe correspondiente en el mismo método que usaste para abonar la primera cuota. En muchos casos, si solo has pagado una parte, se anula el contrato o se ajusta al nuevo importe.
Si se tramita la devolución después de varias cuotas, es posible que se te reembolse solo lo pagado en exceso o que se compense con el valor del producto devuelto, dependiendo de los términos del contrato y de si ha habido intereses ya devengados.
En cuanto a protección del comprador, algunos métodos de pago fraccionado apoyados en plataformas grandes, como Amazon Pay, están cubiertos por garantías adicionales, como la Garantía de la A a la Z de Amazon, que ofrecen una capa extra de seguridad frente a incidencias en el envío o el estado del producto.
Es fundamental que antes de firmar virtualmente la financiación revises las condiciones de devolución de la tienda y las políticas de la financiera, para saber qué pasos seguir y qué plazos tienes en caso de que el equipo no llegue como esperabas o presente algún problema.
Elegir cómo financiar tu nuevo portátil o PC gaming pasa por combinar cabeza fría y algo de picardía: aprovechar ofertas y campañas especiales, seleccionar el equipo con las especificaciones que realmente necesitas, comparar distintas modalidades de pago a plazos y fijarte bien en intereses, límites de financiación y condiciones de devolución. Con una mínima planificación y entendiendo cómo funcionan opciones como Aplazame, seQura, Cofidis, Cetelem o Pepper, es posible estrenar un equipo potente, bien adaptado a tu uso diario, manteniendo tu economía personal bajo control y disfrutando de la tecnología desde el primer día sin asfixiar tu bolsillo.
