Uno de los aspectos más inmediatos de la Xbox One S es su perfil un 40% más delgado en comparación con la consola Xbox One. Si tienes curiosidad por saber cómo Microsoft ha conseguido reducir el tamaño de su consola, hay un interesante vídeo de YouTube que te muestra exactamente eso.
Ben Heck es conocido por su pasión por derribar aparatos y revelar todo lo que hay en su interior. Su última víctima es la Xbox One S y en un vídeo de 20 minutos te muestra lo que ha cambiado Microsoft. Y sí, el mando de la Xbox One S también se rompe.
Quitar la funda de la Xbox One S resultó ser más difícil de lo que Heck esperaba, al menos en comparación con la Xbox 360. Lo primero que notó fue la rejilla más pequeña del disipador de calor de la Xbox, un componente que se encuentra en todos los modelos de consolas Xbox. Redmond también agregó tubos de calor, reemplazando el diseño compacto de los antiguos disipadores de calor.
En la Xbox One S hay una estructura central de cuatro elementos: disco, disco duro, potencia y ventilador, todos etiquetados para una mejor identificación.
Su ladrillo eléctrico es mucho más pequeño que los ladrillos eléctricos utilizados para los modelos anteriores, lo que ayuda a Microsoft a ahorrar un espacio precioso. Heck reveló que Samsung ya no alimenta esta consola, habiendo reemplazado las unidades Samsung por unidades Seagate.
La Xbox One S tiene 16 unidades RAM que ofrecen una capacidad total de RAM de 8 GB. Microsoft diseñó las líneas entre la RAM y el chip de una manera particular para asegurar que toda la RAM tenga el mismo tiempo de acceso.
Echa un vistazo al video de abajo para el desmontaje.
https://www.youtube.com/embed/iC4qIx72_Cc